Existen toda una serie de factores que pueden interferir en nuestro descanso: no solo va a bastar con dormir entre 6 y 8 horas como nos dicen los expertos, también, por ejemplo, la postura en la que dormimos puede llegar a influirnos.
A continuación vamos a destacar algunas de las posturas que deberías adoptar a la hora de dormir y otras que jamás deberías de realizar si no quieres descansar de una forma incorrecta.
Sigue leyendo los puntos siguientes para poder encontrarlas.
Posturas adecuadas para dormir
Boca Arriba
Esta es una de las mejores posiciones que existen para poder conciliar el sueño. Será plenamente respetuosa con nuestro cuello, con la cabeza así como con la columna vertebral.
Conseguirá alinear el cuerpo para no ejercer tanta presión sobre él como en otras posturas. Lo que se intenta siguiendo esta postura es evitar un exceso de presión en la columna que pueda derivar en graves problemas.
De lado
Otra de las mejores posturas es “de lado”. Evitará que podamos sufrir algún tipo de dolor de cuello de espalda. Además, en el caso de que la persona durmiente ronque, esta podría ser una buena solución para dejar de hacerlo.
Ayudará a relajar perfectamente las articulaciones y a que en estas no se produzca ningún tipo de problema. Si tienes dolores de espalda a la hora de dormir y no sabes cuál es la postura adecuada para ti, deberías de probar con esta de inmediato.
Posturas no adecuadas para dormir
- Posición fetal: El principal problema que tiene esta postura es que puede llegar a producir problemas de gran importancia en nuestro cuello. Además, también puede llegar a producir malformaciones en la columna vertebral.
En el caso de que esta sea tu postura favorita y no puedas hacer nada para evitarlo, te recomendamos que escojas una almohada bastante gorda para propiciar el descanso de tu cabeza.
- Boca abajo: Muchas personas utilizan esta postura para dormir porque no se dan cuenta de lo perjudicial que puede ser.
Fuerza en exceso los huesos, incentiva los ronquidos, afecta al tejido muscular y nos levantaremos con dolores en muchas zonas, incluso en algunas que ni tan siquiera sabíamos que existían.
Ahora ya sabes las mejores posturas para dormir y aquellas que debes evitar. Es muy importante que las estudies con detenimiento porque pueden influir de forma muy negativa en nuestro descanso nocturno y, por ende, también en nuestra salud.